Principales Síntomas

Como cualquier enfermedad crónica, la Endometriosis conlleva una dimensión física y, también, unas implicaciones y consecuencias a nivel psicológico y emocional.

Los síntomas físicos más comunes son: dismenorrea, dispareunia, infertilidad y dolor pélvico crónico. La intensidad de estos síntomas no guarda relación proporcional con la extensión anatómica de la enfermedad, dándose casos en los que mujeres con una extensión menor de la enfermedad manifiestan un dolor muy alto, y casos en los que mujeres con una mayor extensión de la enfermedad no refieren casi dolor ni ningún otro síntoma.

Además de estos, las mujeres con endometriosis pueden presentar otros síntomas no ginecológicos como son el dolor abdominal o de espalda, dolor al orinar o defecar, hemorragias (hematuria, rectorragia, hemoptisis, etc.).

Los síntomas generalmente mejoran tras la menopausia y durante la gestación.

Dolor

El dolor menstrual que ocurre durante los primeros años de ciclos menstruales se llama dismenorrea primaria y habitualmente mejora con la edad.

Debe ser motivo de consulta la dismenorrea secundaria, es decir, aquella que aparece más tarde, que aumenta con los meses y que se acompaña de alguno de los otros síntomas típicos de la endometriosis.

Algunas de las características de este dolor son:

  • Dolor que no cede a los tratamientos
  • Dolor pélvico crónico de más de 6 meses de duración, con empeoramiento cíclico
  • Estreñimiento y disquecia (dolor con la defecación), con o sin rectorragia (hemorragia a través del ano, bien sola o asociada a las heces)
  • Dispareunia (dolor durante la penetración) intensa

Dispareunia

Dispareunia o dolor con las relaciones sexuales

La penetración vaginal puede presionar alguna de las zonas con afectación por endometriosis, como son los ovarios (que se sitúan detrás y en la parte más baja del útero), el techo vaginal y los ligamentos uterosacros (encargados de mantener el útero en posición correcta y cerca de la parte más baja de la columna vertebral en el hueso sacro).

Sangrado uterino anómalo

Muchas de las mujeres con endometriosis no presentan ninguna alteración menstrual, así como tampoco pérdidas entre reglas. Sin embargo, los cambios que la endometriosis provoca por la formación de sustancias no habituales en la pelvis y las modificaciones en el funcionamiento ovárico normal pueden alterar el ciclo endometrial y generar pequeñas pérdidas extemporáneas.

Problemas reproductivos

En algunas mujeres la esterilidad (imposibilidad de conseguir un embarazo) o la infertilidad (abortos de repetición) son el motivo de consulta que permite el diagnóstico de endometriosis. No hay que olvidar que así como la endometriosis puede ser causa de conflictos de fertilidad, no todas las parejas con esterilidad o infertilidad deben ésta exclusivamente a la endometriosis. En toda pareja estéril, es necesario un estudio completo que incluya en síntesis, comprobación de la ovulación, analítica hormonal, anatomía del útero, trompas y calidad del semen. Obviamente pueden sumarse varias causas en la pareja.

La endometriosis puede alterar la fertilidad a través de varios mecanismos: inflamación dentro del abdomen que impida la unión entre el óvulo y el espermatozoide, adherencias pélvicas que impidan el movimiento normal de las trompas e incluso las obstruyan, endometriosis en los ovarios que impida la normal ovulación y fabricación de las hormonas sexuales y secreción de sustancias dentro del abdomen que no sean habituales y entorpezcan el proceso normal de fertilidad. Por otra parte, se desconoce porque una vez conseguido el embarazo, las mujeres con endometriosis presentan un riesgo mayor de aborto, riesgo que disminuye cuando se ha corregido la enfermedad. Al parecer estas sustancias anormales fabricadas por la endometriosis y las alteraciones de las defensas que generan, pudieran ser las responsables de estas pérdidas gestacionales de repetición.

  • Dolores abdominales
  • Sequedad vaginal
  • Dolor al evacuar o al orinar
  • Trastornos digestivos
  • Cansancio o astenia
  • Cambios fuertes de humor

La severidad y los síntomas varían dependiendo de cada mujer y cada caso concreto, pero es importante informar que no existe relación entre el grado de la endometriosis y los síntomas que se presentan.

Esto viene a demostrar que una mujer puede tener un grado leve de endometriosis, y sin embargo, padecer síntomas importantes, mientras que otra, con un estado más avanzado no padezca ninguno de ellos.

Fuente: Congreso Médico sobre Endometriosis. Hospital de La Paz, Abril 2009.

Dimensión Emocional

Normalmente la parte más visible e identificable de la enfermedad es la dimensión física que consta de síntomas, pruebas, tratamientos, etc., y es la parte emocional la que corre el riesgo de quedar más oculta y pasar desapercibida, aunque no por ello significa que sea menos real e importante en la vida de las mujeres.

Lo que no se nombra “no existe”, deja a la mujer sola y favorece los sentimientos de incomprensión y una sensación de gran confusión. Por todo esto es realmente importante que tanto las mujeres como los profesionales y personas que forman parte de su vida tengan en cuenta esta parte que acompaña la enfermedad y sepan reconocerla, validarla y tratarla con sensibilidad.

Para profundizar en esta dimensión emocional de la Endometriosis, te invitamos a consultar nuestra guía psicológica, que consta de varios artículos temáticos.