En el abordaje de la endometriosis se debería valorar, además y entre otros, cuestiones como la nutrición, la permeabilidad intestinal, el déficit de vitamina D.

La endometriosis es una enfermedad inflamatoria, por ello la importancia de llevar una vida sana con alimentación preferiblemente antiinflamatoria.

También se puede valorar recomendar la realización de ejercicio, preferiblemente ejercicio de fuerza, si es posible, y de manera progresiva, así como la realización de terapias «cuerpo/mente» como elemento para reducir el estrés.